No hay ninguna norma sobre la frecuencia con la que las personas mayores deben acudir al médico, pero la mayoría debe someterse al menos a una revisión médica al año, aunque parezca que se encuentran perfectamente. Durante las visitas anuales de bienestar, el proveedor de su ser querido puede evaluar el riesgo de enfermedad, revisar los medicamentos, comprobar los problemas de salud y la gestión de enfermedades crónicas, hablar sobre temas de estilo de vida, y repasar las pruebas recomendadas.
Pero ¿por qué debe mi ser querido hacerse un chequeo anual? realmente?
Un proveedor puede realizar pruebas rutinarias a las que no podemos acceder en casa, como análisis de sangre, electrocardiogramas y otros exámenes. Estas pruebas proporcionan información importante sobre el estado de salud de su ser querido.
La edad aumenta el riesgo de padecer problemas de salud y muchas afecciones no presentan síntomas hasta que son realmente graves. Es más probable que un proveedor detecte un problema de salud que nosotros solos.
Se pueden encontrar problemas y factores de riesgo que aumenten la probabilidad de enfermar en el futuro y suscitar un debate sobre lo que se puede hacer al respecto.
Es la oportunidad perfecta para repasar la medicación de su ser querido, algo esencial para mantener su salud. El profesional sanitario debe conocer todos sus medicamentos, tanto los de venta con receta como los de venta libre, los suplementos dietéticos y las plantas medicinales. De este modo, el profesional dispone de la lista más actualizada y puede identificar posibles interacciones o problemas de salud, así como confirmar que los medicamentos son eficaces para tratar enfermedades crónicas.
Pone de manifiesto los hábitos que deben mejorarse -dieta, ejercicio, sueño, estrés- y su ser querido recibe un asesoramiento sólido y personalizado directamente de un profesional médico.
Para estar al día de las vacunas recomendadas e informarse de las novedades.
Obtener las pruebas y el apoyo más actualizados para la gestión de enfermedades crónicas.
Para ahorrar dinero. Es mucho más barato prevenir enfermedades que tratarlas.
Sólo un proveedor puede derivar a su ser querido para que se someta a más pruebas o ponerle en contacto con los especialistas adecuados, y son la clave para coordinar la atención total de su ser querido.
Por fin, un proveedor puede revisar las cosas con usted como cuidador y ofrecerle apoyo en ayudar a su ser querido con las funciones cotidianas para que siga siendo independiente y se encuentre bien.